Aprendiendo de los mejores films: Caballero sin espada, 1939

El mundo evoluciona rápido. La vida cambia rápido. Las personas hacemos todo rápido y las empresas que alcanzan más rápido sus resultados son las empresas rápidas frente a las empresas grandes.

Nos perdemos cantidad de cosas que no apreciamos y dejamos pasar oportunidades empresariales que no somos capaces de ver. Las verdaderas maravillas además no están en las grandes cosas sino en las cosas cotidianas y sencillas.

Tenía un amigo que decía: “Yo me conformo con pequeñas cosas, una pequeña mansión, un pequeño yate y una pequeña fortuna”. No son estas pequeñas cosas que decía mi amigo las que te harán feliz y que te permitirán conseguir tus resultados sino que serán las acciones del día a día y que son casi gratis. Dar un paseo con tu pareja, compartir una tarde de juegos con tus hijos, recuperar una relación perdida, etc.

Las empresas a veces no perciben que los pequeños detalles y los maravillosos resultados empresariales están en las pequeñas acciones diarias. Acciones además no sólo centradas en gestión sino centradas en relación. Estamos en este mundo para apreciar las maravillas que nos rodean y sólo apreciando las mismas conseguiremos mejores resultados.